¿Cómo funcionan los detergentes y por qué Natural Load® es una alternativa sostenible?

Cuando hablamos de limpieza, los detergentes están presentes en casi todos los hogares. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo funcionan realmente? ¿O si esa espuma abundante es sinónimo de limpieza? En Green Team, creemos que conocer lo que usamos es el primer paso para cuidar de nuestra salud y del planeta.
El agua es la que lava: el verdadero rol del detergente
Aunque suene contradictorio, el agua es el principal agente de limpieza. Lo que hacen los detergentes es facilitar su trabajo. Los tensioactivos (también llamados compuestos activos) son los ingredientes clave: son moléculas con una parte que ama el agua (hidrofílica) y otra que la rechaza pero se une a la grasa (hidrofóbica). Gracias a esta estructura, los tensioactivos separan la suciedad de la ropa y del agua, ayudando a que las partículas de grasa, mugre o polvo se desprendan y se mantengan suspendidas en el agua, para luego ser arrastradas con el enjuague.
Un ejemplo común es el lauril sulfato de sodio (SLS), que hace mucha espuma, pero no es tan amigable con el medio ambiente. Por eso nosotros usamos glucósidos, que vienen del coco o del maíz, son suaves y se degradan fácilmente.
Muchos detergentes modernos también incorporan enzimas, que cumplen funciones muy específicas. Estas proteínas degradan residuos complejos, haciéndolos solubles o más fáciles de remover con el agua.
Así, mientras los tensioactivos separan la suciedad de la superficie, las enzimas la degradan en fragmentos más pequeños. Esta combinación de acción física y biológica es lo que realmente limpia, no la espuma.
La gran mentira de la espuma
Es común creer que más espuma significa más limpieza, pero eso es un mito. La espuma no limpia. De hecho, es un obstáculo tanto para el medio ambiente como para el buen funcionamiento de las lavadoras.
Muchas marcas de detergente usan compuestos diseñados específicamente para hacer espuma, como el 1,4-dioxano. Este ingrediente, aunque puede ser resultado de procesos de producción y no un aditivo intencional, aparece en fórmulas convencionales y es motivo de gran preocupación:
- Su biodegradación y exposición a rayos UV lo convierte en una sustancia tóxica, potencialmente cancerígena y dañina para la vida marina y para las cargas microbiológicas naturales de los cuerpos de agua.
- La espuma también daña los sensores de las lavadoras modernas (especialmente las de alta eficiencia, HE), impidiendo que midan correctamente el nivel de agua. Esto reduce la calidad del lavado, daña las fibras de las prendas y genera una falsa percepción de limpieza.
- Finalmente, la espuma sirve para ocultar el verdadero estado del agua, impidiendo que se vea si realmente se removió la suciedad.
En otras palabras: la espuma es el peor enemigo del ambiente y de tu lavadora. Y, paradójicamente, se usa más en detergentes de baja gama, porque “vende” una sensación visual de limpieza, aunque el desempeño real sea deficiente
¿Y qué pasa con los microplásticos?
Algunos detergentes convencionales incluyen microplásticos como abrasivos, estabilizantes o cápsulas de liberación lenta. Estas diminutas partículas no se eliminan fácilmente en plantas de tratamiento de aguas residuales y terminan en ríos, lagos y océanos. Allí afectan a la fauna marina y, eventualmente, llegan a nuestra mesa a través de la cadena alimenticia.
Por eso, en Green Team desarrollamos Natural Load®, una fórmula concentrada en láminas de detergente que no deja residuos de microplásticos, ni en tus prendas ni en el planeta. Cuenta con la certificación Plastic Free de FLUSTIX, otorgada por DIN CERTCO. Su composición incluye glucósido de coco y está diseñada para generar la espuma justa y necesaria, la cual es completamente biodegradable.
Además, al venir en láminas, evitamos el uso de envases plásticos innecesarios, promoviendo una limpieza verdaderamente sostenible desde el empaque hasta el desagüe.